viernes, 18 de mayo de 2018

Aceite de oliva Único de Mondrón: el AOVE fenicio.


Texto: Laura Escobar | Fotografías: La Opinión
La cooperativa de San José Artesano de Mondrón ha logrado el ‘Óscar de los aceites’ en un concurso internacional en Nueva York.
La verdial de Vélez quiere conquistar el mundo del aceite. Ése es el objetivo que la pequeña cooperativa aceitera de San José Artesano de Mondrón, aldea de Periana, se ha propuesto. Para ello, se han decidido hacer un aceite de oliva virgen extra (aove) premium elaborado únicamente con dicha variedad de aceituna que sólo se cultiva en esta zona de la Axarquía. Es única en el mundo. Y de ahí su valor y su nombre: Único de Mondrón. «La diferenciación y poner en valor el producto es lo que ha motivado a nuestra cooperativa a lanzar al mercado un aceite de oliva virgen extra premium con este», comenta su gerente, Francisco Alcántara. Una decisión arriesgada ya que al ser una variedad tan exclusiva podría no ser entendida por profesionales y consumidores. Sin embargo, lejos de ser así, este producto con apenas tres meses de comercialización, ya ha conseguido el máximo reconocimiento internacional logrando la medalla de oro en la competición de World Olive Oil Competition de New York.
Visitando el campo
El proyecto arrancó en enero de 2017 cuando la junta directiva quiso hacer algo para ayudar a realzar la calidad de su producto estrella. Para ello, tomaron dos decisiones. Por un lado, hacer una inversión de medio millón de euros para adquirir una nueva molturadora. Y por otro, un estudio de campo que ofrecería las máxima garantías para lograr el producto que querían elaborar. «Comenzamos a visitar periódicamente el campo desde enero de 2017 para ver cuándo era más óptima la aceituna», relata Alcántara. Este trabajo que también pasó por estudiar otras cosechas, culminó con la recolecta de la aceituna a principios de noviembre. «Son olivos centenarios y milenarios por eso tienen unas características singulares, maduran más tarde», apostilla el gerente de la cooperativa. En noviembre ya tenían 8.500 litros del aove que buscaban.

Se trata de un aove de aroma intenso a aceituna fresca verde, hierba y notas de fruta fresca como plátano, ciruela o fruta tropical, de entrada dulce en boca y de amargor y picor medio. Es un aceite temprano.
San José Artesano es una cooperativa pequeña de 400 socios y 50 años de antigüedad. Al año sólo producen un millón de kilos de aceite de oliva virgen extra, pero pese al esfuerzo que para ellos supone, tienen muy claro su apuesta por Único de Mondrón. «Lleva muy poco tiempo en la calle y estamos buscando ampliar la red comercializadora en tiendas gourmets, oleotecas y estaciones de servicios. Es un gran reto para nosotros», explica Francisco Alcántara.
Este aceite se presenta en latas de 2,5 litros a 18 euros, el pack de cuatro, y en botellas de medio litro a 6,5 euros. Un precio muy por debajo de su valor pero que atiende, según el gerente, a una estrategia comercial. «Es un precio de lanzamiento para darlo a conocer», comenta el gerente. Sin embargo, también reconoce que el haber ganado la medalla de oro en el certamen más importante del mundo ha disparado las ventas. «Ganar el premio fue toda una sorpresa, al ser una variedad tan desconocida por los jueces puede llevar incluso a la expulsión al no entender las características de sabor y aroma tan singulares. Ahora, gracias a ese galardón la venta en tiendas y nuestra web se ha multiplicado por diez», relata.
Esta aceituna tan poco reconocida cuanta no sólo con un gran valor gastronómico, sino también cultural. Algo que desde la cooperativa han querido reflejar en el diseño de la botella al incluir en ellas el ojo que los fenicios dibujaban en sus jábegas, como símbolo de protección, ya que éstos fueron los que trajeron en sus embarcaciones la variedad de verdial de Vélez. La historia de un aceite que comenzó en el mar.